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La felicidad es plana, monótona, rudimentaria. Lo demás es euforia, y la euforia es fugaz y deja resaca.
Resaca es el título de la más reciente novela de L.M Oliveira. Pudimos tener una charla con el autor y aquí te decimos por qué tienes que meterte de lleno a este libro que te hará ver los eventos desafortunados con otra mirada.
La historia que nos da Oliveira es definitivamente cruda, si tuviéramos que resumirla tendríamos que hablar de un hombre, Pablo, cuya vida, a veces monótona, toma un giro terrible: su hija, su esposa, lo abandonan y ahora emprende un viaje terrible a los abismos de sí mismo.
Pablo descubre que eso de tener una vida asegurada es la broma más grande que nos puede jugar el destino: el concepto de la rueda de la fortuna es un acertado y macabro recordatorio de que la vida como la conocemos puede acabarse en cuestión de días, el secreto claro está, radica en qué hacemos desde los abismos que nos toca visitar en este mundo.
El protagonista de esta excelente novela comienza a hacer un viaje por su miseria cuyos acompañantes son seres que han tenido una vida dura y que le muestran que la suerte es siempre prestada. Pablo, el doctor, el sensato padre de familia, el hombre útil a la sociedad debe mirar al monstruo que crece cuando todo le es arrebatado (y preguntarse, desde luego, si de verdad le fue arrebatado o ha sido él mismo quien lo ha dejado ir).
Si bien, pocos de nosotros podemos afirmar que tenemos la vida comprada, el mismo autor nos recordó que cualquiera puede reconocerse en este personaje por la simple razón de que todos hemos perdido algo, de que todos hemos despertado un día con la sorpresa de que la vida ha cambiado y es a través de Pablo que podemos poner en perspectiva el dolor de lo que se fue.
No se asusten queridos lectores, esto no es un libro de superación personal, muy al contrario, la historia puede volverse muy cruda a ratos y no hay ninguna lección que el autor nos quiera dar, sino acaso poner en papel la forma en que algunos se enfrentan a sus crisis personales.
La euforia y la felicidad son temas que la novela ensaya desde un punto de vista fresco y nada ingenuo, Oliveira nos advierte precisamente de lo fácil que es confundir ambas. La euforia como un momento de plenitud y a veces de huída, la felicidad como un disfraz plano de la segura monotonía.
Resaca tiene un título muy adecuado. Qué pasa cuando despertamos de la ebriedad de la felicidad, qué pasa cuando la plenitud llega a marearnos tanto que cuando se va, el mundo brilla tanto que nos duele. El autor de la novela nos contó en entrevista las muchas interpretaciones que podemos tener de la palabra Resaca, fue muy sorprendente para él darse cuenta de las posibilidades que esta palabra traía consigo, del sentimiento de volver de un lugar (la ebriedad, no necesariamente del alcohol) y mirar a la cara el mundo fuera de un estado mental exacerbado.
Piensa en el dolor de cabeza, la vergüenza que experimentas, el mal sabor de boca, dolor del cuerpo, una cuasi fobia a la luz y sobre todo, el sentimiento de que esa euforia, esa felicidad están ahora tan lejanas cuando, precisamente mientras las experimentabas, creías que serían eternas. Pues es a partir de esos dolores, físicos y del alma que se teje un historia a veces oscura a veces cómica del paso de Pablo por un mundo que le cuesta reconocer.
Tuvimos que preguntarle a Oliveira si este libro, las andanzas de un hombre que lo ha perdido todo, podían lindar en lo autobiográfico. El autor nos dejó claro que sí que hay algo de él en el personaje pues uno siempre escribe desde su propia experiencia y si bien los hechos en el libro no se relacionan con su vida, sí ha sufrido caídas y sí se ha levantado con la resaca de perder lo que ganamos en el exceso.
Resaca es una novela cuya prosa es tan accesible como poderosa, es un libro para rayar todo el tiempo porque claro, está lleno de luminosas sentencias que nunca caen en lo didáctico, más bien se muestran como terribles pero redentoras verdades.
Tienen que conseguir este libro, en definitiva uno de los mejores con los que nos encontramos este año y que estamos seguros les dejará con un peculiar sabor de boca.
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